miércoles, 12 de octubre de 2011
Amar la primavera 6
La que no podía amar
A partir de Marco Ausonio
el poeta de Burdeos
que vivió en los trescientos
supimos que la Pomona
tutelaba los septiembres
los jardines más cuidados
y las frutas ya maduras.
Una deidad requerida
que no podía amar.
Vertumno, dios de estaciones
era el más venerado
la amaba profundamente
y sin ser correspondido
se disfrazó de anciana
y la pudo abrazar,
felicitando a Pomona
la que no podía amar.
Es solo una leyenda
que hoy quiero recordar
porque en el siglo XXI
cuantas no pueden amar.
Donde está ese rey oculto
que busca hasta encontrar
donde un amor tan profundo
para empezar a buscar.
Ni la distancia ni el tiempo
mis heridas curarán
y transito por la vida
elogiando los septiembres
y frutas a saborear
pero mientras más camino
más parezco esa deidad
la que llamaban Pomona
y que no podía amar.
Texto: María Evelia Pérez Nicotra - 13.10.11 - 2.00 am
Del libro: 'Alguna vez la vida' (3.18 am del 22.9.11)
Foto de la escultura: Vertumno y Pomona, 1760
(Jean-Baptiste Lemoyne el Joven, 1704–1778)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario